https://www.badosa.com
Publicado en Badosa.com
Portada Biblioteca Novelas Narrativas globales

Como el cielo los ojos

Javier 13

Edith Checa
Tamaño de texto más pequeñoTamaño de texto normalTamaño de texto más grande Añadir a mi biblioteca epub mobi Permalink Ebook MapaLlanes
Tabla de navegación de la novela hipertextual
12345678910111213
JavierJavier 1Javier 2Javier 3Javier 4Javier 5Javier 6Javier 7Javier 8Javier 9Javier 10Javier 11Javier 12Javier 13Javier
IñakiIñaki 1Iñaki 2Iñaki 3Iñaki 4Iñaki 5Iñaki 6Iñaki 7Iñaki 8Iñaki 9Iñaki 10Iñaki 11Iñaki 12Iñaki
PacoPaco 1Paco 2Paco 3Paco 4Paco 5Paco 6Paco 7Paco 8Paco 9Paco 10Paco 11Paco
12345678910111213

He hecho un trato con tu madre. Voy a comprar la casa. Mantendré todo igual, como tú lo tenías. Cuidaré de tus muebles, de tus libros, hasta que la pequeña Laura quiera llevárselos. Está muy contenta, ¿sabes? Nos hemos hecho muy amigos. Nada más salir del colegio se viene conmigo y con las gatas. No se las ha llevado con la abuela porque dice que tardarán en acostumbrarse y que es mejor no cambiarlas tanto; que en verano sí, en verano ya con su padre. Está muy contenta porque sabe que cuido bien de tus cosas. Soy el guardián de tu casa, Isabel. Y a tu hija nunca le faltará de nada porque voy a publicar un libro con tus poemas, y más cosas, ya te iré contando. El libro se va a llamar como tú querías Letargos color violeta, y están todos, desde aquel que escribiste con dieciséis años sobre Llanes hasta los últimos.

¿Sabes?, la niña ha empezado a leer tus libros, los que pusiste en la lista del testamento. Está leyendo a Alfonsina y algunas veces cuando no entiende qué significa algo yo se lo explico. También está entusiasmada con La sombra del ciprés es alargada. Yo le he dicho que es muy triste pero está empeñada en leerlo y va como una moto, y me comenta cosas, y me discute otras.

Le he dado un poema que escribiste para ella, pero se lo sabía de memoria:

«... la estrella del alba que anhelaba mi alma violeta, crece entre mis manos como rosa de abril bañada de rocío que es amor...»

Comenzaste muchos poemas para la niña pero no los acababas, siempre ponías lo mismo:

«... la amo tanto que no puedo expresarme con palabras...»

Y así los terminabas todos. Ella también lo sabe y se ríe. Me dice que alguna vez se puso celosa porque no le dedicabas poemas pero que ahora lo entiende.

He leído algunos relatos que también voy a publicar. Hay uno sobre todo que me ha deprimido «Cuentas de cristal», ¿te acuerdas?

«... las cuentas de cristal del rosario irradiaban pequeñas luces de colores que iban de un lugar a otro entre las tumbas jugando al tula-tula. Un pájaro, quizás un grajo, graznó sobre su cabeza en lo alto. Lentamente comenzó a alejarse de la tumba de su abuelo, sin movimientos bruscos para no llamar la atención de las mujeres que aún rezaban...»

¿Sabes por qué?, ¿por qué me ha deprimido? Porque yo no tengo tumba donde ir a verte, donde ir a hablar contigo. Saber que tus restos están allí. Acariciar tu lápida y limpiar las letras que forman tu nombre. Yo no puedo ir cada domingo, como la protagonista de tu cuento, a visitarte. Llanes está muy lejos para ir cuando se me forme este nudo de dolor en la garganta. Cuando tu ausencia se me haga insoportable como ahora. Quisiera que estuvieras cerca, más cerca. Echaré de menos una lápida donde llorarte, en la que colocar ramos de margaritas frescas de todos los colores, pero sobre todo amarillas que son las que más te gustan. No hay solución, me ha dicho tu madre, mañana esparciremos tus cenizas en el mar, en ese mar que tanto quieres.

Al pasar por el sitio donde tuviste el accidente he ido lento, muy lento, por si acaso todo es mentira y estás todavía ahí en la cuneta necesitando mi ayuda. Por si acaso nada ha ocurrido. He ido lento pero he estado a punto de apretar el acelerador y estrellarme contra cualquier cosa porque así podría quitarme la angustia que me produce tu ausencia, tu ausencia que es inacabable, no tiene fin. Pero he ido despacio porque no sé si al otro lado del arco iris podré verte, no sé siquiera si existe algo. ¿Y si no estás?, ¿y si no hay nada?, prefiero vivir aquí con tus recuerdos a arriesgarme a no sentir. Al menos, así, te tengo.

Anoche encontré una especie de cuento con postales de Llanes. Pones, en las pastas azules y deterioradas «Recuerdos de Llanes, 1973». Tenías dieciséis años cuando le prometiste al mar que volverías:

«... y allí sentada en aquella roca, con el viento en mi cara y la mar a mis pies, lloraré; y aquel mar que tanto quiero sin ya dudarlo mío será y yo seré de él...»

Hay una postal del viejo muelle donde escribías poemas, donde llorabas tus penas de niña, y donde deseas que esparzan tus cenizas. Es una postal en la que se ve el mar embravecido, las olas se elevan por encima de la destruida roca.

Estamos en el extremo del viejo muelle, de pie, sobre la roca. Hemos venido tus seres más queridos y los que más te amamos: tu hija, tu madre, tu tía, tus dos hermanos y yo. Una pequeña familia como decías siempre. Tu madre mantiene sobre su pecho el cofre con tus cenizas, aquél que yo besé. Me ha dicho que tiene miedo de que las cenizas caigan sobre las rocas y se acumulen allí; que quiere echarlas lejos. Le he dicho que yo deseo coger un puñado de ti y echarte a volar para fundirte con el viento y con el mar, y todos han dicho que también desean hacerlo y cada uno va cogiendo tus cenizas y todos al unísono las tiramos con la dirección que lleva el viento y se alejan suspendidas en el aire, un segundo como dos galaxias de corpúsculos esmeraldas que fueron tus ojos; suspendidas tus cenizas en el aire como una orquesta de amapolas rubí intenso bañadas de alborada que conformaron tu boca; suspendidas en el aire, por un segundo, dos cortejos de millares de palomas blancas que fueron tus manos...

«... quiero diluir mi esencia con la misma naturaleza para sentirme viva eternamente..., sentirme viva mientras alguien me ame, sobre todo el viajero que tiene como el cielo los ojos.»

FIN
Tabla de navegación de la novela hipertextual
12345678910111213
JavierJavier 1Javier 2Javier 3Javier 4Javier 5Javier 6Javier 7Javier 8Javier 9Javier 10Javier 11Javier 12Javier 13Javier
IñakiIñaki 1Iñaki 2Iñaki 3Iñaki 4Iñaki 5Iñaki 6Iñaki 7Iñaki 8Iñaki 9Iñaki 10Iñaki 11Iñaki 12Iñaki
PacoPaco 1Paco 2Paco 3Paco 4Paco 5Paco 6Paco 7Paco 8Paco 9Paco 10Paco 11Paco
12345678910111213
Tabla de información relacionada
Copyright ©Edith Checa, 1995
Por la misma autora RSS
Fecha de publicaciónMayo 1999
Colección RSSNarrativas globales
Permalinkhttps://badosa.com/n052-j13
Opiniones de los lectores RSS
Su opinión
Cómo ilustrar esta obra

Además de opinar sobre esta obra, también puede incorporar una fotografía (o más de una) a esta página en tres sencillos pasos:

  1. Busque una fotografía relacionada con este texto en Flickr y allí agregue la siguiente etiqueta: (etiqueta de máquina)

    Para poder asociar etiquetas a fotografías es preciso que sea miembro de Flickr (no se preocupe, el servicio básico es gratuito).

    Le recomendamos que elija fotografías tomadas por usted o del Patrimonio público. En el caso de otras fotografías, es posible que sean precisos privilegios especiales para poder etiquetarlas. Por favor, si la fotografía no es suya ni pertenece al Patrimonio público, pida permiso al autor o compruebe que la licencia autoriza este uso.

  2. Una vez haya etiquetado en Flickr la fotografía de su elección, compruebe que la nueva etiqueta está públicamente disponible (puede tardar unos minutos) presionando el siguiente enlace hasta que aparezca su fotografía: mostrar fotografías ...

  3. Una vez se muestre su fotografía, ya puede incorporarla a esta página:

Aunque en Badosa.com no aparece la identidad de las personas que han incorporado fotografías, la ilustración de obras no es anónima (las etiquetas están asociadas al usuario de Flickr que las agregó). Badosa.com se reserva el derecho de eliminar aquellas fotografías que considere inapropiadas. Si detecta una fotografía que no ilustra adecuadamente la obra o cuya licencia no permite este uso, hágasnoslo saber.

Si (por ejemplo, probando el servicio) ha añadido una fotografía que en realidad no está relacionada con esta obra, puede eliminarla borrando en Flickr la etiqueta que añadió (paso 1). Verifique que esa eliminación ya es pública (paso 2) y luego pulse el botón del paso 3 para actualizar esta página.

Badosa.com muestra un máximo de 10 fotografías por obra.

Badosa.com Concepción, diseño y desarrollo: Xavier Badosa (1995–2023)