En este relato epistolar ambientado en el Senegal y escrito por David Medina, la protagonista, repasando acontecimientos recientes, hace balance de vida: no de la vida que ha dedicado a los demás, sino de su propia vida. Una narración relatada por una mujer desesperanzada que escribe:
No hay día en que con la ayuda de la prudencia de la razón no perpetremos un pequeño atentado contra nosotros mismos.
También disponible en catalán.
«Querida Gertrudis:Me complacería mucho que a la llegada de esta carta te encontraras ya totalmente recuperada; pero de no ser así, desearía que al menos mis cavilaciones te permitieran olvidar las tuyas, aunque sólo fuera por unos momentos...»
Keys: vida, sangre, noche
Ojalá no lo entiendas
M’ha agradat molt, m’agradaria que escrivís alguna altra cosa.
Anònim